sábado, 26 de junio de 2010

Fin de temporada

Caja Laboral Parque 72 - Afición de Parque 61
Para finalizar la temporada, un encuentro contra aficionados del club. El partido se convirtió pronto en una pachanga, donde un muy diezmado equipo de la afición puso en jaque durante algunos minutos a Parque. Desde luego el carácter lúdico primó muy mucho sobre el buen juego, que fue más bien escaso.

Tras el partido, un concurso de triples de excelente nivel. En la final, buenos participantes, y un inconmensurable Manu, que con su anotación hubiera ganado cualquier concurso. Menos hoy. Hoy Patxi, una vez más, se erigió en dominador, con una exhibición portentosa.
También hubo un concurso de two ball entre dos parejas, donde Yolanda y Manu estuvieron un poco más afortunados que Lina e Iñigo.

domingo, 13 de junio de 2010

Torneo Clausura (IV). La Final. El partido

Ugeraga Saski 50 - Leioa 42
El partido llevó unos cauces distintos del que habíamos ganado en Leioa meses atrás. En aquella ocasión ganábamos con aparente comodidad hasta los últimos minutos, cuando la igualdad fue máxima; mientras en esta ocasión la igualdad fue máxima hasta el último cuarto, donde las jugadoras sacaron lo mejor de sí, donde demostraron el porqué fueron las mejores de la final. Aunque hasta llegar ahí hubo que sufrir, y mucho.

Nuestro calentamiento no fue especialmente intenso. No obstante, el comienzo del partido se mantuvo igualado. Costaba atacar y defender más que otros días, dado el rival que teníamos enfrente, mas ellas no abrían diferencia en el marcador. Más bien al contrario, éramos nosotras las que lográbamos ciertas rentas a favor. Y comencé a creer.
Al descanso, 22-19 ganando.

El tercer cuarto fue muy espeso. Lo acabamos perdiendo, 30-31. Pero el comienzo del último cuarto revivió nuestros ánimos. Asistí orgulloso a una exhibición defensiva del equipo. Intensidad, buena colocación. Actitud, mucha actitud. Fueron unos minutos iniciales del último período que valieron por todo el partido, por todo el torneo, y que deslabazaron las esperanzas de victoria que Leioa pudiera albergar al terminar el tercer cuarto. Desde ahí hasta el final se mantuvo la diferencia.
Ni tan siquiera la defensa zonal de Leioa les sirvió. Defensa que me sorprendió, a la par que me decepcionó en ese equipo.
Al final, victoria. Al final, torneo clausura. Al final, las jugadoras han mostrado que pueden. Cuando se quiere, se puede. Y la clave del triunfo es de todas. Todas las canastas fueron decisivas (incluso la canasta de Irati, que también anotó, y que nos hizo celebrarlo a todos), todos los rebotes contaron, todos los pases, todos los esfuerzos defensivos, todos los robos. Todas aportaron, todas ganaron. Felicidades Irati, Ixone, Olatz B., Laura, Azahara, Ane, Leire, Mireia, Raisa, Natalia, Olatz F., Asier. Felicidades campeonas.




We are the champions

Torneo Clausura (III). La Final. Calentamiento

Ya estamos en la final. Una más para mí. Hasta ahora las he perdido todas. Así que no me siento para nada nervioso ni preocupado; total, otra perdida más no sería ya ninguna novedad.
El encuentro se juega una vez más en nuestra cancha, como hace dos días. Por lo que nos comentan de Leioa, vemos que la organización federativa ha sido un desastre. El entrenador de Leioa se ha enterado de contra quién, dónde y a qué hora se jugaba la final gracias al delegado de Ugeraga. Nadie de federación le ha avisado. Y el equipo arbitral se ha enterado a duras penas.

Jugamos por tercera vez esta temporada contra Leioa. El balance es de empate, nosotras ganamos en Leioa en la primera vuelta de la liga, en un partido que se nos complicó en los últimos minutos, en los cuales nuestra ventaja previa se fue disipando hasta el punto de que "acabamos pidiendo la hora del final". En el de vuelta, la derrota en Urko fue algo dolorosa, en tanto en cuanto fue en el basket eguna. Nuestra falta de intensidad en aquel partido la acabamos pagando.
Aquella derrota se producía en una época que me pareció un punto de inflexión de la temporada, en la cual Leioa parecía in crescendo en su nivel, mientras nosotras llevábamos un camino contrario, más bien descendente.

Con todo ello la victoria no me parecía sencilla, nada sencilla. Asier me comentó previamente al partido que teníamos opciones de ganar. No sé si lo decía con la boca pequeña, mas quizá tenía razón. Sólo era cuestión de esperar. Si ellas comenzaban presionando con intensidad y comenzábamos perdiendo balones, pensaba que perderíamos. No obstante, si no era así, por qué no soñar con ganar el torneo.

viernes, 11 de junio de 2010

Torneo Clausura (II)

Ugeraga Saski 66 - Carmen Basket 48
Estamos en las semifinales. Jugamos un viernes, a petición del equipo contrario. Hemos llegado hasta aquí sin un excesivo esfuerzo, merced a la calidad de las jugadoras que tiene este equipo y al buen hacer de su entrenador Asier durante los encuentros previos. Pero se me antoja que si Carmen ha llegado hasta aquí son tan favoritas como nosotras para plantarse en la final.
Durante el calentamiento observamos que tienen jugadoras que nos pueden crear problemas. Y durante el encuentro se confirman estas apreciaciones.

El partido no resulta fácil, aunque una vez más la intensidad defensiva cuando se quiere ponerla en práctica nos permite abrir diferencias en el marcador. Y finalmente el partido resulta más cómodo de lo que preveíamos al comienzo. La diferencia final así lo dice, y mi corazón desde luego lo agradece.

sábado, 5 de junio de 2010

Torneo Clausura (I)

Ugeraga Saski 53 - Padura 39
A pesar de que ya ha acabado mayo, aún sigue la competición. En este caso sigo no con Parque, sino con las cadetes de Ugeraga Saski.
Jugamos con Padura, en Urko. Aparentemente somos favoritas, mas no me fío un pelo de un equipo que también ha ganado los tres partidos anteriores. Así pues, quien gane hoy se clasifica para las semifinales del torneo. Torneo del que la mayoría hablamos mal, pero que todos queremos ganar.

Me gusta este equipo de Padura, su calentamiento, y sobre todo su vuelta a la calma tras el partido. Además juegan muy organizadas. Y ese se convierte precisamente en su mayor defecto, juegan demasiado organizadas. Y además dependen demasiado de su principal jugadora.
Nuestro juego no es especialmente bueno (llevamos ya unos cuantos partidos con la intensidad defensiva justa), pero es suficiente para ganar.

domingo, 23 de mayo de 2010

Mañana de espera

Me levanto temprano. Tengo intención de ir hasta Leioa, al campo de Askartza, para ver un trascendental Txiki Askartza frente a Santurtzi. Me interesa sobre todo por lo que podemos aún conseguir nosotros en función del resultado que se de. Si Santurtzi gana podemos ser campeones de liga. Para ello tendríamos que superar a Boskozaleak esta tarde. Si Txiki por contra es el vencedor, nosotros "sólo" podríamos quedar subcampeones ganando a Bosko.

Creo que ganará Txiki. Fundamento mi pronóstico en que juegan en casa (aquel frontón no es un lugar sencillo para jugar a baloncesto), y en que Santurtzi lleva ya varias jornadas cuesta abajo, o al menos es lo que se aprecia viendo sus últimos resultados.
Así las cosas, cambio de opinión y no voy a ver dicho partido. Casi prefiero no enterarme del resultado, dado que para mí sería una decepción no quedar primeros teniéndolo tan cerca.

Mi móvil recibe un mensaje. Son las 12 y unos minutos de la mañana. Lo leo, dice que mis pronósticos se empiezan a cumplir, que Txiki ha ganado a Santurtzi.
No sé quién me lo envía. Lo vuelvo a leer, quizá deseando haber visto mal, y que fuera Santurtzi el que ha obtenido la victoria, mas no, corroboro que Txiki ha ganado. Por un momento se me cae el alma al suelo. Ya lo esperaba, sin embargo no puedo dejar de sentirme decepcionado. Siempre quedando segundo en esto del basket, nunca primero. Es mi sino.

Me intento abstraer de este asunto hasta la hora de nuestro partido, aunque no es fácil. No sé si decírselo a los jugadores. No sé si les va decepcionar como a mí, si les restará ganas para afrontar el encuentro con garantías.
En cualquier caso sé que vamos a ganar, y a quedar subcampeones..., otra vez.

Esa traidora llamada confianza

Estoy preparando las cosas que voy a llevar al partido. Al ser el último encuentro de liga meto algo para que los aficionados piquen durante el mismo. Además, incluyo unas botellas para celebrar el subcampeonato. La última final en que preparé la celebración la perdimos (como tantas otras, por cierto), pero en esta ocasión no se trata de una final propiamente dicha, y estoy convencido que el subcampeonato va a ser el premio a nuestra temporada.

Llego a Jesuitas, desde donde nos trasladaremos a Barakaldo. Aún no sé si decirles que ha ganado Txiki. Llega Iker y me lo pregunta. Se lo digo. Ya está, ya saben que únicamente podemos quedar segundos. Espero que eso no les haga bajar los brazos, porque el partido va a ser difícil. Mejor dicho, la victoria, no me cabe duda, va a ser difícil.

Llegamos al campo, y una parte de él... ¡está mojado! Hoy que hace un calor de la pera, y hay una persona regándolo. Alucinamos.
Parece que han tenido fiesta y está tratando de adecentarlo, sin saber que ahora teníamos partido. Vamos desalojando agua hacia fuera del campo, pero justo detrás de la línea de fondo donde atacaremos en la primera parte permanecerá mojado un buen rato.

Ya he enviado un sms preguntando quién me ha informado esta mañana de la victoria de Santurtzi. Me dice quién es. Juegan dentro de un rato contra Indar Saski. Le felicito por adelantado por su título de liga.

Mientras calentamos Txemi me recuerda ciertos condicionantes que se dan en aquellos partidos en que las pasamos moradas para ganar, y me señala la dificultad de este encuentro. Es cierto, aunque creo que ninguno de nosotros piensa que vayamos a perder.
Dejo la cámara a una aficionada para que saque fotos. Todo está preparado. Comienza el partido...

El Boskosazo (I)

Boskozaleak 44 - Caja Laboral Parque 41
El primer cuarto fue dominado por el contrario. Tácticamente su ataque nos ocasionaba problemas, pero nuestro empecinamiento en estar mal colocados defensivamente (una vez más a vueltas con el mismo tema) nos dejaba en una posición de desventaja que pagamos cara.
Nos bastaba colocarnos bien y mostrar ciertas dosis de inteligencia para resolver el porqué de que nuestra defensa hiciera agua, pero opté por otra solución, cambiar el tipo de defensa. El primer cambio fue un desastre, donde su facilidad para superar nuestra defensa fue aún más patente. El segundo cambio defensivo, en cambio, ya produjo mejores resultados. Pero acabando el encuentro nuestra colocación defensiva tampoco era óptima, y ahí aprovechó Boskozaleak para crearnos problemas.

Si nuestra defensa no fue buena, sobre todo en ciertas fases del partido, nuestro ataque fue aún peor. Aunque esto ya lo esperaba, dado que este campo no es precisamente el mejor escenario para practicar un buen basket.
Había pocas ideas de ataque, y las pocas que se nombraban en el banquillo, simplemente no se hacían en el campo.

Perder este encuentro no entraba en mi cabeza, teníamos que hacer muchas cosas mal para que ocurriera. Debíamos fallar en casi todo para no llevarnos la victoria. Y fallamos. Falta de acierto en el tiro, falta de rebote, descolocada defensa, falta de ritmo de juego... Aunque para que esto sucediera también Boskozaleak tuvo algo que ver. Fueron inteligentes, e hicieron lo que les correspondía para crearnos problemas. Y nosotros hicimos el resto, esto es, permitir que así fuera. Y si un problema no nos lo creaba el otro equipo, éramos nosotros mismos los que lo provocábamos.
Y para rematar nuestra cadena de despropósitos estaba yo. No di soluciones, o al menos no aquellas que la buena lógica proponía, la rotación de cambios no fue buena, y en suma, en el partido más decisivo dirigí uno de los peores partidos, sino el peor, de la temporada.

El Boskosazo (II)

Boskozaleak 44 - Caja Laboral Parque 41
A pesar de todo, el partido estaba igualado, y era posible ganarlo. A falta de dos minutos para el final ganábamos por 4 puntos, lo que era una renta apreciable según estaba transcurriendo la segunda parte. Entonces ya vi ganado el encuentro. Comencé a pensar en lo mucho que nos había costado, en que nos faltó poco para pifiarla. Y entre dichas cavilaciones, el encuentro seguía, y Boskozaleak "resucitó", o quizá nosotros recaímos. Porque en esos últimos minutos, un parcial desfavorable de 7-0 nos hundió en la miseria, en una de tipo moral.
Los estiletes de ese parcial, los dos jugadores que más puntos metían en Bosko. Lo sabíamos. Conocíamos que el único que metía triples era el gran veterano de Boskozaleak, pero con empate a 41, finalizando el encuentro, una descolocada defensa no pudo llegar a tapar el tiro desde 6,25 de dicho jugador, que lanzó sólo y anotó la canasta que nos remató.
Esos últimos minutos fueron una retahíla de despropósitos. Muy mal ataque, sin juego de equipo y sin acierto en el tiro, mala colocación defensiva, también unas incomprensibles decisiones arbitrales, supongo que a causa del calor, que nos perjudicaron, un anotador que no informaba de las situaciones y de los tiempos de partido... Todo lo que podía salir mal, salió

Ni la inmensa actuación individual de Manu pudo evitar una derrota increíble, e impredecible, contra un equipo sobre el papel inferior al nuestro.
Al finalizar, junto con nuestro público, bebimos las botellas. Y ellos, los de Boskozaleak, fueron los que lo celebraron.

Fuera del campo

Dentro del campo

domingo, 16 de mayo de 2010

Un ascenso silencioso (bat)

Caja Laboral Parque 67 - Bilvending Txiki Askartza 61
Éste era el partido. Todo lo anterior había sido muy productivo, victorias contundentes, meritorias, sufridas, espectaculares... Pero ganar este encuentro significaba el ascenso matemático a Senior Preferente. Y sobre todo, significaba el conseguir por fin lo que estos jugadores, y los que estuvieron antes habían perseguido, y también habían merecido.

Éste era el día. Volvíamos a tener otra oportunidad de lograrlo, como hace dos temporadas nos sucedió con Unamuno en aquel último encuentro de liga. Mas en esta ocasión mi confianza en la victoria era plena. No sólo sabía cómo ganar a Txiki Askartza, sino que estaba convencido de que lo íbamos a lograr. Era nuestro momento.

El partido comenzó bien, con un parcial de 5-0 en 5 minutos, el tiempo que Askartza tardó en anotar su primera canasta. Y también el tiempo que tardó Arteaga, de Txiki, en comenzar su recital, anotando 14 de los 18 puntos visitantes del primer cuarto.
Con un parcial de 0-10 en los minutos finales de ese período Askartza nos dejaba algo tocados, y volvían a asomar los fantasmas del partido de ida, donde ciertos desajustes defensivos ocasionaron el principio de nuestro cataclismo.
Mas en esta ocasión no iba a permitir que nada ni nadie menguara la fe en la victoria, así que expuse con meridiana claridad lo que había que hacer para ganar, y los fantasmas se fueron alejando. Mediado el segundo cuarto volvíamos a estar empatados.
Antes del descanso apareció otro protagonista, otro jugón en Txiki, Sistiaga, quien inició su racha de triples. Pero ahí estaba Asier para contrarrestarla. Sobre la bocina del final de cuarto enchufó un espectacular triple, que nos daba vida. Al descanso llegábamos dos puntos por delante.

Canastas de Asier que provocaron el impulso moral definitivo, cerraron por completo una pequeña grieta que se había formado en mi fe en la victoria, y mantuvo ésta como un bloque moral de hormigón. Anteriormente, durante el primer cuarto hubo otra grieta, que se cerró en cuanto cierto jugador aceptó y ejerció su importante papel defensivo.
Así pues, la victoria, y por ende el ascenso era cuestión de tiempo, exactamente de 20 minutos, lo que restaba para finalizar...


Now we are free