Nueva y previsible victoria, contra el equipo más asequible a priori del grupo. Si bien no me fiaba ni un pelo de Indar Saski, y sobre todo de su campo descubierto y con poca luz, tuvimos la gran suerte de que no lloviera. Además nuesta concentración no menguó hasta la segunda parte y merced al ritmo impuesto, a la superioridad bajo tableros, y al gran acierto en el tiro exterior, conseguimos un parcial de 0-17 en la primera parte que nos abría considerablemente el camino hacia un triunfo más sencillo de lo esperado. Y de paso, me dejaba respirar más tranquilo.
En esta holgada victoria contribuyó, entre otros, un majestuoso Emi, que consiguió un récord al aire libre, muy cercano al conseguido por Iñigo unas semanas atrás.
Con éste ya son 400 partidos los vividos por este club. 400 momentos de desencuentros, de alegrías, de ilusiones, de objetivos, de historias bien contadas, o bien escuchadas. 400 momentos de Parque Bilbao.
A todos los que han hecho esto posible, Gracias.
Blowin' in the wind
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