domingo, 16 de mayo de 2010

Un ascenso silencioso (bat)

Caja Laboral Parque 67 - Bilvending Txiki Askartza 61
Éste era el partido. Todo lo anterior había sido muy productivo, victorias contundentes, meritorias, sufridas, espectaculares... Pero ganar este encuentro significaba el ascenso matemático a Senior Preferente. Y sobre todo, significaba el conseguir por fin lo que estos jugadores, y los que estuvieron antes habían perseguido, y también habían merecido.

Éste era el día. Volvíamos a tener otra oportunidad de lograrlo, como hace dos temporadas nos sucedió con Unamuno en aquel último encuentro de liga. Mas en esta ocasión mi confianza en la victoria era plena. No sólo sabía cómo ganar a Txiki Askartza, sino que estaba convencido de que lo íbamos a lograr. Era nuestro momento.

El partido comenzó bien, con un parcial de 5-0 en 5 minutos, el tiempo que Askartza tardó en anotar su primera canasta. Y también el tiempo que tardó Arteaga, de Txiki, en comenzar su recital, anotando 14 de los 18 puntos visitantes del primer cuarto.
Con un parcial de 0-10 en los minutos finales de ese período Askartza nos dejaba algo tocados, y volvían a asomar los fantasmas del partido de ida, donde ciertos desajustes defensivos ocasionaron el principio de nuestro cataclismo.
Mas en esta ocasión no iba a permitir que nada ni nadie menguara la fe en la victoria, así que expuse con meridiana claridad lo que había que hacer para ganar, y los fantasmas se fueron alejando. Mediado el segundo cuarto volvíamos a estar empatados.
Antes del descanso apareció otro protagonista, otro jugón en Txiki, Sistiaga, quien inició su racha de triples. Pero ahí estaba Asier para contrarrestarla. Sobre la bocina del final de cuarto enchufó un espectacular triple, que nos daba vida. Al descanso llegábamos dos puntos por delante.

Canastas de Asier que provocaron el impulso moral definitivo, cerraron por completo una pequeña grieta que se había formado en mi fe en la victoria, y mantuvo ésta como un bloque moral de hormigón. Anteriormente, durante el primer cuarto hubo otra grieta, que se cerró en cuanto cierto jugador aceptó y ejerció su importante papel defensivo.
Así pues, la victoria, y por ende el ascenso era cuestión de tiempo, exactamente de 20 minutos, lo que restaba para finalizar...


Now we are free

No hay comentarios:

Publicar un comentario